Para comenzar tenemos que saber que las acciones son partes de una empresa, mientras que un ETF, es un activo que replica un índice bursátil determinado, por lo tanto se compone por una cesta de acciones, bonos y otro tipo de activos.
Tomando en cuenta que las acciones y los ETFs son los activos financieros más populares y operados por los inversionistas, a continuación vamos a hacer algunas comparaciones entre ambos para que así puedas seleccionar el que mejor se adapte a tus necesidades.
Criterio | Acciones Individuales | ETFs |
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Pros | ||
Potencial de Ganancias | Elevadas si eliges correctamente. | Menor debido a la diversificación. |
Control | Directo sobre empresas específicas. | Menos control sobre selección individual de empresas. |
Costos | Sin costos de gestión. | Generalmente bajos, pero existen tarifas de gestión. |
Diversificación | Menor, depende de las acciones seleccionadas. | Alta, ya que sigue un índice. |
Flexibilidad | Depende del mercado y la liquidez de la acción. | Alta, se negocian en bolsa como acciones. |
Contras | ||
Riesgo | Mayor debido a la volatilidad y desempeño de la empresa. | Menor debido a la diversificación. |
Investigación Requerida | Alta, seguimiento de noticias y reportes financieros. | Menor, ya que se sigue un índice. |
Tarifas | No hay tarifas de gestión, pero pueden existir comisiones de corretaje. | Tarifas de gestión del fondo, aunque suelen ser bajas. |
Diferencias entre invertir en acciones y invertir en ETFs
- Costo de diversificación
La diversificación de las acciones es más costosa, debido a que hay que comprar cada acción individualmente y esto implica una gran inversión. Para lograr una diversificación significativa, es necesario comprar acciones en muchas compañías.
Por otra parte, una sola acción de un ETF es una combinación de diferentes inversiones y por lo general se puede usar el ETF para lograr la diversificación con mucho menos dinero invertido del que se necesitaría para comprar las mismas acciones individualmente.
Los ETFs están formados por una cesta de acciones, bonos y otro tipo de activos, y además replican un índice bursátil, esto lo convierte en un producto financiero diversificado y de fácil acceso para todos los capitales.
El precio de los ETFs varía en tiempo real, como el de un título bursátil, y se puede comprar y vender en cualquier momento del día.
- Riesgo de inversión
Invertir en acciones se considera una inversión de alto riesgo, ya que los precios fluctúan ampliamente y esto aumenta la posibilidad de grandes pérdidas si las cosas van mal para la empresa, sin embargo, una acción puede generar grandes ganancias si se invierte en la empresa correcta.
Por otra parte los ETFs invierten en docenas o incluso, cientos de empresas, lo que quiere decir que la mayoría tiene una importante diversificación incorporada. Por lo tanto, una acción de bajo rendimiento puede compensarse con otras acciones de mejor rendimiento dentro del ETF. Pero esto también puede tender a limitar las ganancias potenciales.
- Control de la inversión
Las personas que están dispuestas a invertir en acciones deben investigar y analizar muy bien a la empresa donde van a invertir su dinero, este un proceso que lleva tiempo, pero vale la pena ya que un buen inversionista en acciones debe saber con certeza a dónde va su dinero.
Para un inversor con poca experiencia los ETFs se consideran productos más sencillos de entender, con características que se ajustan más a su perfil y con bajos costes, sin embargo, invertir en acciones necesita un conocimiento previo para analizar la compañía, sus variables fundamentales y los factores que condicionarán su comportamiento futuro. Lo que se considera una ardua labor.
Los inversores siempre tendrán la opción de combinar ambos tipos de activos para tener una cartera óptima que esté alineada con la estrategia de inversión y así, disfrutar de las ventajas que ambos activos ofrecen.
- Exposición al mercado
Al momento de invertir en acciones resulta más sencillo enfocarse en el rendimiento de una empresa en particular, como es el caso de una empresa que esté bien administrada o sea innovadora.
Por otra parte los diferentes tipos de ETF brindan a los inversionistas maneras sencillas de conseguir una amplia exposición a diferentes mercados. Muchos ETF están diseñados para replicar los índices, como el S&P 500. Sin embargo, otros se enfocan en sectorescomo la tecnología o la energía.
Ya sabemos que una acción es un tipo particular de valor o instrumento de inversión, pero también hay otros valores importantes como los bonos.
Muchos ETF invierten en acciones, pero también se pueden comprar ETF que invierten en bonos, una combinación de acciones y bonos, divisas, materias primas y más. Estos otros valores pueden proporcionar otra forma de diversificación.
Lo más importante es que el inversionista analice cuáles son las ventajas y las desventajas de cada uno de los instrumentos que hemos mencionado y cuáles son sus objetivos al momento de hacer la inversión. Sin embargo, si tienes alguna duda puedes solicitar la asesoría de expertos en la materia que te ayudarán a logras tus objetivos.
En conclusión podemos decir que las acciones y los ETFs pueden ser complementos en los portafolios de inversión, teniendo en cuenta que será positivo tener acciones en directo por que conoces la empresa, mientras que los ETFs darán exposición a un mercado, sector, país o materia prima de forma rápida y eficiente.
Te recomendamos que evalúes detenidamente toda la información que te hemos entregado el día de hoy y así puedas tomar la mejor decisión al momento de invertir tu dinero.
¡Gracias por leernos!